Querido Niño Jesús:
Este año no deseamos carros nuevos, ni casas grandes, ni prendas lujosas. Estas Navidades, queremos bendiciones, salud, paz, amor y bienestar para nuestros nenes. Igual que el año pasado, te pedimos estos dones para nuestros tesoros, nuestros hijos, nietos, sobrinos y amiguitos.
- Ilusión para que vivan la vida con alegría y entusiasmo. No solo en la Navidad, si no todo el año. Que tengan tanta ilusión que los problemas de nosotros los adultos no apaguen la magia de ser niños.
- Fortaleza para que puedan enfrentar las dificultades y obstáculos que se presenten, sobre todo cuando no estemos a su lado. En especial, te pedimos que les des fortaleza si son víctimas de “bullying” o maltrato de cualquier tipo. Dales fortaleza para levantarse y seguir hacia adelante para tratar de nuevo hasta lograr lo que se propongan.
- Curiosidad para explorar y aprender sobre el mundo. Curiosidad para hacer todas las preguntas que tengan en su mente, sobre todo esas que nos “matan” de la risa y nos recuerdan la inocencia y sinceridad con que viven. Curiosidad para aprender dentro y fuera de la escuela y para desarrollar sus intereses al máximo.
- Salud para que sigan creciendo y desarrollándose. Salud para sobrellevar cualquier condición o enfermedad que estén enfrentando al momento. Salud para que vivan una vida plena, feliz e independiente.
- Sensibilidad para entender sus sentimientos y los de los que le rodean. Para respetarse a sí mismos y a los demás. Para entender lo que sucede a su alrededor y poder tomar las decisiones correctas. Sensibilidad para que desarrollen una conciencia social, un compromiso con sus seres queridos y que sean ciudadanos responsables.
Bendícelos y cuídalos hoy y siempre. Nuestros nenes son nuestros tesoros y nuestra razón de vivir. Nos dedicamos y sacrificamos para darles las mejores oportunidades posibles. Te pedimos todo esto desde lo más profundo de nuestro corazón.
¡Gracias y Feliz Navidad!