En los bosques de Puerto Rico existe una riqueza natural incalculable. Para los amantes del hiking o senderismo, Puerto Rico cuenta con varios bosques idóneos para este tipo de actividad. De la misma manera, para quienes gustan de pescar, paseos en kayak, avistar aves o simplemente disfrutar de la naturaleza, los bosques de Puerto Rico tienen su magia, de ahí el reconocido eslogan: Puerto Rico, la Isla del encanto. Sea cual sea la elección, la experiencia de sumergirse en la naturaleza de esta isla del Caribe es simplemente alucinante.
Conoce estos 5 boques que todo puertorriqueño debería visitar 1 vez (o 100 veces) en la vida.
BOSQUE GUAJATACA
En el municipio de Isabela, en la zona cársica del noroeste de Puerto Rico, se encuentra el bosque Guajataca. Se puede decir que este bosque es un laberinto en sí mismo, en el que sus 44 kilómetros de veredas se entrelazan unas con otras. Este bosque húmedo subtropical tiene el mejor sistema de veredas de todos los bosques nacionales. En el recorrido se puede llegar hasta la Cueva del Viento; este lugar es un ecosistema natural que tiene un gran valor biológico. Otro punto de interés de este bosque es la Torre de Observación, desde donde se puede apreciar la majestuosa vista de los mogotes.
Se han reportado 186 especies de árboles en el bosque Guajataca. Entre los más comunes se encuentran el capá prieto, el úcar, el árbol de María, el aquilón y el tintillo. Entre la fauna del lugar se pueden encontrar boas y murciélagos. La boa o culebrón de Puerto Rico es una especie en peligro de extinción. Algunas aves que se pueden avistar son el carpintero, el bien-te-veo, la reina mora, el san Pedrito y el múcaro.
BOSQUE SECO DE GUÁNICA
Una de las reservas más importantes de la Isla se encuentra al sudoeste de Puerto Rico, el bosque seco de Guánica. Este bosque es de gran importancia científica, ya que es hogar de especies que son únicas de la zona. Además, cuenta con varios ecosistemas, entre ellos las playas arenosas y costas rocosas. En este bosque, que abarca los municipios de Guánica, Guayanilla, Yauco, Peñuelas y Ponce, se puede hacer senderismo, pasear en kayak y pescar.
Varias especies de fauna protegidas se pueden encontrar en esta reserva natural. Entre ellas: el sapo concho, el juey morao y el guabairo. La única población natural del sapo concho se encuentra en este bosque. Algunas aves que se observan en el área son el zumbadorcito, el pájaro bobo, el san Pedrito y el comeñame.
Debido a que en algunas áreas del bosque hay escasez de agua y exceso de salitre, el crecimiento de la vegetación en dicha zona es limitado. La vegetación dominante del lugar es de árboles y arbustos de poca altura. Entre la fauna que crece en el bosque seco se puede mencionar: el palo de rosa, el árbol de violeta y el cactus de cuatro lados. El mangle de botón también crece en el bosque seco de Guánica, al igual que árboles como el úcar y el almácigo.
BOSQUE GUILARTE
En este entorno natural se pueden apreciar picos altos y valles expuestos; caracterizados por una vegetación de poca altura. El Pico de Guilarte está entre los montes más altos de la Isla. A una elevación de 3,950 pies sobre el nivel del mar, este pico es uno de los lugares más interesantes del bosque Guilarte. Este bosque se divide en siete segmentos en los municipios de Adjuntas, Guayanilla, Peñuelas y Yauco.
Entre la vegetación del lugar resalta un bosque de palma de sierra y también hay plantaciones de eucalipto y capá prieto. Otros árboles que se pueden encontrar al visitar el bosque son: el nogal, el helecho de bosque enano y el palo de Ramón. El bosque Guilarte se destaca además porque parte de las cuencas del Río Grande de Añasco, el Río Guayanilla y Río Grande de Arecibo pasan por su suelo. Estas cuencas hidrográficas son de suma importancia para el abasto de agua del país.
Por otro lado, el coquí Eneida, el coquí de montaña, la boa de Puerto Rico, el bien-te-veo, el murciélago rojo frutero y el halcón de sierra, encabezan la lista de las especies más vulnerables del lugar. Entre las más de sesenta especies de aves que habitan el lugar, se pueden mencionar: el san Pedrito, el carpintero, la paloma turca y el zumbadorcito.
BOSQUE DE MARICAO
El Bosque de Maricao, localizado entre los municipios de San Germán, Sabana Grande y Maricao, es un bosque único en la Isla. La combinación del suelo del lugar, su clima y la importancia de su flora y fauna, hacen de este bosque uno singular. Tanto la flora, como la fauna, se caracterizan por tener diversas especies en peligro de extinción. La flora, por ejemplo, guarda especies vulnerables y en peligro como el palo de rosa, el higüero de sierra y la orquídea. Entre la fauna que se encuentra protegida se puede mencionar una especie de mariposa endémica, la Atlantea tulita.
Algunas aves que se pueden observar en el bosque Maricao son: el guaraguao, el halcón de sierra, el guabairo pequeño, la reinita del bosque enano y el bien-te-veo. También se puede escuchar el canto de varias especies de coquí como el coquí de montaña, el coquí palmeado y el coquí caoba.
Este bosque también cuenta con múltiples veredas que llegan hasta puntos específicos donde se disfruta de hermosas vistas panorámicas. En días claros y despejados, desde la cima más alta, se puede ver hasta la Isla de Mona. Además, aquí nacen catorce ríos que convergen al río Guanajibo, que a su vez desemboca en Mayagüez y al río Grande de Añasco. O sea que, el bosque es de gran relevancia para el suministros de agua a la zona oeste.
Por otro lado, el bosque también tiene valor económico, ya que es fuente de ingreso al erario. En el Bosque Estatal de Maricao se ubican retransmisoras de radio y televisión, además de instalaciones de radiocomunicaciones.
BOSQUE TORO NEGRO
En el bosque Toro Negro, en la región central de Puerto Rico, hay nueve ríos: Matrullas, Saliente, Toro Negro, Guayo, Blanco, Indalecia, Anón, Inabón y Prieto. Este bosque se ubica entre los municipios de Orocovis, Jayuya, Ponce, Juana Díaz y Ciales. Las veredas del Bosque Toro Negro llegan hasta la Torre de observación; desde donde se admira la hermosa vista de los lagos Guayabal y Toa Vaca.
Algunas especies en peligro de extinción que están protegidas en el lugar son el guaraguao de bosque y el falcón de sierra. Por otro lado, entre las veinte especies de reptiles que habitan en este bosque se pueden mencionar: el lagartijo pigmeo, la culebra ciega y la boa de Puerto Rico, esta última en peligro de extinción. El coquí común, el coquí churí y el coquí de la montaña se destacan entre las especies de anfibios. El coquí de montaña está en la lista de especies vulnerables.
Entre los árboles más comunes que se pueden encontrar aquí se destacan: el ausubo, el árbol de maga y el tabonuco. Otro tipo de vegetación abundante en el lugar son los helechos arbóreos y las palmas de sierra.
Hacer buen uso de estos espacios naturales promueve la conservación de nuestros recursos. El visitar los bosques de Puerto Rico ofrece enormes beneficios para el cuerpo humano, como el respirar aire puro y energizarse con el poder de la naturaleza.
PRÁCTICAS DE TURISMO CONSCIENTE:
1. Aprender sobre los recursos naturales de la isla.
2. Estar en contacto con la naturaleza.
3. Cuidar de los espacios verdes.
¿Has vistado alguno de estos bosques? Cuéntanos, ¡comparte tus fotos!
Nota: Este escrito es de Pamy Rojas para QueHagoconlosNenes.com. No es permitido copiar, distribuir, transmitir, o reproducir este blog sin obtener la autorización previa de Quehagoconlosnenes.com. El mismo puede ser compartido a través de redes sociales siempre y cuando se incluya un enlace al blog original.